Este Simposio tiene como interés develar la estructura de la crisis personal y social que atraviesa el actual momento histórico. Una crisis que causa un profundo malestar a individuos y pueblos y es potenciada por la acumulación de narrativas distorsionadas de un sistema global capitalista, individualista y depredador, que impone su estructura asentada en la violencia.
El enfoque comprende una amplia gama de desafíos, desde la búsqueda de significado existencial, hasta las guerras, la amenaza nuclear, la pobreza, la desigualdad de oportunidades, la discriminación y la emergencia climática y ecológica, en un tiempo marcado por la incertidumbre, el irracionalismo y creencias e ideologías retrógradas y decadentes.
Además de abordar en profundidad la comprensión estructural y de proceso histórico de la crisis terminal del sistema imperante, el Simposio busca, sobre todo, ser un catalizador para la presentación de nuevos caminos humanistas para su superación.
Es fundamental para ello recoger los aportes de todas las culturas de la Tierra, comprendiendo y superando los prejuicios y limitaciones de la matriz política, económica y cultural impuesta por siglos de colonialismo y patriarcado. Los elementos más progresivos de las tradiciones culturales de los pueblos deben converger para servir de fundamento a la primera civilización planetaria de la historia humana.
Asimismo, es imprescindible comprender que no habrá cambio posible si no hay una transformación en el modo de mirarnos y mirar lo que sucede en el mundo. Es preciso desarrollar una mirada que trascienda la mecánica de un mundo víctima de la mezquindad y la locura, y ampliar la perspectiva mediante el desarrollo de una conciencia lúcida y del "buen conocimiento". Resulta ineludible alinear las visiones con las aspiraciones más elevadas de cada individuo y de la humanidad en su conjunto y activar aquellas experiencias profundas y comunes que han permitido a la humanidad progresar y evolucionar a lo largo de la historia. De esta manera, el ser humano recuperará un sentido existencial válido, saltando por sobre el abismo de los estímulos y escala de valores caduca del sistema.
Recogiendo las experiencias positivas de los momentos humanistas de la historia, hoy más que nunca, se hace necesario poner énfasis en imágenes que movilicen a los conjuntos hacia brillantes utopías, que conecten con las tensiones y necesidades vitales más profundas, orientando a la humanidad en una dirección liberadora.
Dirección en la que se exprese una sensibilidad donde el ser humano se constituya en valor y preocupación central, se afirme la igualdad de todos los seres humanos y se valore la diversidad personal y cultural. Asimismo, esta actitud implica el fortalecimiento de la tendencia al desarrollo del conocimiento por encima de lo aceptado o impuesto como verdad absoluta, donde se despliegue la libertad de ideas y creencias y toda forma de violencia sea repudiada.
En definitiva, el Simposio pretende ser un espacio de diálogo crítico, constructivo y creativo, que promueva un entendimiento profundo de la crisis multidimensional de este sistema inhumano y no perfectible que hoy aprisiona al espíritu humano. Al mismo tiempo, el Simposio crea un ámbito para proponer perspectivas humanistas, que puedan guiar a la sociedad hacia un futuro noviolento, sostenible y equitativo: ¡La Nación Humana Universal!